Los Hermanos de las Escuelas Cristianas llegan a Agüimes en septiembre de 1949. Desarrollan su labor docente en el Complejo Parroquial hasta junio de 1952. El nuevo curso lo comenzarían en las aulas del Colegio Jesús Sacramentado, hoy Nuestra Señora del Rosario.
Apenas asentados en este su nuevo destino, los Hermanos emprenden una serie de actividades que exceden los límites del aula. Y de todas las iniciativas pergeñadas, en un lugar preeminente, hay una que les preocupa sobremanera: prolongar los vínculos colegio-alumnos más allá del final de su etapa escolar. Será ésta una idea que se coronaría unos pocos años más tarde, diciembre de 1955, con la constitución de la Asociación de Antiguos Alumnos de San Juan Bautista de La Salle y de María Inmaculada.
Bajo el paraguas de esta institución, más de un centenar de jóvenes entusiastas, tutelados por los Hermanos, ponen en marcha la “Magna Cabalgata de Reyes”, un evento que fue durante muchos años la actividad primordial de la joven Asociación.
Momentos agradables y enojosos se entremezclaron a lo largo de los años, sobre todo a partir de la marcha de los Hermanos, en 1968. Pero detrás había muchas personas con coraje, con fervor, con ilusión… Unas personas que empujaron el proyecto durante décadas y hoy nos lo presentan vivo, arraigado y más comprometido que nunca con la sociedad agüimense.
En la actualidad la Asociación la Salle está muy presente en su pueblo. Presente con una Agrupación Musical y Majorettes La Salle que pasean con orgullo el nombre de Agüimes por todos los pueblos de nuestra isla y más allá de los mares. Presente con actos culturales y festivos, religiosos y profanos que llenan su agenda. Presente en la Romería del Rosario y en la Cabalgata de Carnaval. Presente en los encuentros de Villancicos y conciertos. Coral Polifónica… Santa Cecilia. Presente con varias escenificaciones: en Semana Santa, el Auto de la Pasión, y en Navidad el Auto de Reyes, una celebración emblemática que cada cinco de enero concita las más afables sonrisas de niños y no tan niños que miran con asombro las siluetas de tres figuras majestuosas que avanzan pausadamente tras la estela de una enigmática estrella.
Esta actividad ha merecido algunos premios:
- El Plátano Canario 1995, de la Fundación La Solana de Las Palmas de Gran Canaria.
- La Espiga de Oro 1997 del Ilustre Ayuntamiento de esta Villa.
- «Bienhechora del Instituto» en 2001, de la Congregación de los Hermanos de las Escuelas Cristianas.